Cuando empieza el calor y el tiempo se vuelve más húmedo empieza el riesgo de infestación por garrapatas, estos molestos parásitos deben ser retirados lo antes posible de nuestros amigos caninos ya que existe el riesgo de que les trasmitan enfermedades, además de poder engancharse también en los humanos.
Las garrapatas son ácaros hematófagos, su forma es parecida a una lenteja cuando están recién agarradas y a una alubia cuando ya han succionado sangre del perro, pueden multiplicar varias veces su tamaño dependiendo del tiempo que lleven prendidas a la piel del animal, en España las tres especies de garrapatas más comunes son:
Rhipicephalus sanguineus, Dermacentor reticulatus e Ixodes ricinus .
garrapata vacia (izqda.) y llena (dcha.)
ALGUNOS CONSEJOS PREVENTIVOS:
- Desde que empiezan los primeros días de calor usar productos antiparasitarios, estos se presentan en varios formatos: collares, esprays, pipetas, píldoras…..
- Evitar las zonas de paso de ganado, sobre todo ovino, ya que las ovejas son grandes portadoras y transmisoras de garrapatas, es fácil saber por donde han pasado las ovejas por sus excrementos en forma de huesos de aceituna.
- Evitar las zonas de hierba alta, ya que son las preferidas de las garrapatas para esperar “el autobús canino”.
- Revisar al perro cada poco tiempo, sobre todo al volver a casa después del paseo, más abajo indicaremos las zonas más sensibles y que hay que examinar con mayor atención.
- Si conviven varios animales en la misma casa inspeccionarlos a todos, ya que las garrapatas pueden pasar de unos a otros.
- Si se han detectado garrapatas enganchadas puede ser conveniente desparasitar la cama de nuestra mascota con algún producto no tóxico para evitar la reinfestación.
A la hora de examinar al perro para detectar garrapatas hay que poner especial cuidado en las zonas con la piel más fina y más vascularizada (con mayor riego sanguíneo), ya que es allí donde se suelen fijar estos parásitos, es siempre conveniente hacer la inspección a contrapelo y fijarnos en cualquier pequeña discontinuidad ya que algunas especies de estos ácaros son muy pequeños cuando todavía no están llenos de sangre.
PRINCIPALES ZONAS DONDE REVISAR:
- Pezuñas: separando bien los dedos uno por uno y mirando bien en todos los rincones.
- Orejas: hay que examinarlas concienzudamente, por dentro y por fuera, puesto que es uno de los sitios preferidos por las garrapatas.
- Axilas y zona genital: conviene poner atención en los aparentes “lunares” ya que estos pueden ser garrapatas, en perros con pelo largo conviene hacer un examen muy meticuloso.
- Cuello, cara y sobre todo cerca de los ojos: en algunas razas con arrugas en el hocico y/o cara como bulldog, bóxer, shar pei, etc… es más que conveniente revisar a fondo estas arrugas.
- Cualquier zona con pliegues en la piel: puesto que las garrapatas tienen mayor facilidad para penetrar la piel en esas zonas además de estar más ocultas y protegidas.
Cuando revisemos estas zonas podemos aprovechar para comprobar también la ausencia de espigas, muy peligrosas estas al clavarse profundamente en la piel del animal y ocasionarle molestas y peligrosas heridas.
QUE HACER SI EL PERRO COGE GARRAPATAS:
Al retirar las garrapatas hay que hacerlo con sumo cuidado pues si no se sacan enteras la cabeza puede quedarse dentro de la piel del perro lo que podría provocar infecciones.
Hay dos métodos efectivos según la zona de enganche, la habilidad del propietario y la pasividad o no del perro al manipularlo:
Este método está indicado para perros tranquilos, propietarios hábiles y zonas no delicadas. Se coge la garrapata con unas pinzas curvas lo más cerca de la piel posible sin pellizcar al perro y se tira despacio y sin hacer demasiada fuerza (para no partir la cabeza y dejarla dentro) al cabo de un rato la garrapata acaba soltando por si sola, es conveniente recalcar que no hay que tener prisa, cada garrapata puede llevarnos hasta dos minutos, pero así nos aseguraremos de sacarla entera, existen en el mercado pinzas y otros instrumentos especiales para este propósito, pero si no los tenemos a mano, unas pinzas de depilar (siempre curvas) servirán.
- Aceite u otra substancia oleaginosa:
Las garrapatas respiran a través de unos orificios en su cuerpo, por lo que si las cubrimos bien de aceite o de otra substancia oleaginosa no tendrán más remedio que soltarse al cabo de unos minutos para evitar la asfixia, hay que estar atentos para retirar el parásito una vez desprendido y destruirlo, ya que si no podría engancharse en otra parte o en otro ser vivo.
El aceite de oliva o girasol, la vaselina y la parafina funcionan bien y suelen estar presentes en la mayoría de lo hogares.
Este método puede llevar algo más de tiempo, pero es efectivo, es conveniente señalar que cuando la garrapata está anclada cerca de los ojos solo se debe usar el aceite de oliva y hacerlo con sumo cuidado, ya que si le cayera otra substancia al perro en el ojo podríamos provocar irritación u otros problemas oculares.